• Más de la mitad de las ganancias fueron tomadas por holders de largo plazo
• El precio de BTC cayó $5.000 tras tocar los $123.000
¿Hodl hasta el final? No esta vez. En una maniobra poco habitual, los inversionistas de largo plazo en Bitcoin protagonizaron una de las mayores tomas de ganancias del año, retirando $1.960 millones en un solo día, según datos on-chain de Glassnode. El movimiento impulsó una realización total de beneficios de $3.500 millones en las últimas 24 horas, una cifra que pone de relieve el impacto económico real detrás del último rally alcista de Bitcoin.
El hecho de que los llamados long-term holders normalmente reacios a vender incluso en periodos de alta volatilidad– lideraran esta salida masiva, representa un giro inesperado. Contrario a lo que suele ocurrir, los traders de corto plazo no fueron los principales responsables del flujo, aunque también liquidaron una suma considerable: $1.540 millones, equivalente al 44% del total.
Una ola de ventas en máximos del ciclo
La realización de beneficios coincide con el máximo local de Bitcoin en $123.000, alcanzado brevemente antes de retroceder hasta la zona de $117.000. Este comportamiento sugiere un patrón clásico de presión de venta tras máximos de ciclo, reforzado por una serie de velas rojas en los gráficos diarios que reflejan el agotamiento del impulso comprador.
Los indicadores técnicos también refuerzan esta visión: el RSI diario muestra señales de enfriamiento, lo que sugiere que el mercado podría estar entrando en una fase de corrección o consolidación. Sin embargo, la estructura técnica general sigue siendo sólida, con el precio aún cotizando por encima de las medias móviles de 50 y 200 días.
Señal de alarma o ajuste saludable
Más allá de la volatilidad inmediata, el dato clave es que el rally reciente no solo fue impulsado por la narrativa de los ETF o las condiciones macroeconómicas favorables, sino que ya está generando decisiones económicas tangibles entre los grandes tenedores de BTC. Este tipo de comportamiento suele observarse en fases avanzadas de mercado alcista, donde los inversionistas institucionales o experimentados comienzan a materializar beneficios ante picos de liquidez.
El impacto de esta toma de ganancias masiva podría provocar una presión bajista adicional si se suman más ventas en los próximos días. No obstante, el mantenimiento de niveles técnicos clave aún permite cierto margen de maniobra para una recuperación o consolidación estructurada.
El comportamiento de las ballenas de Bitcoin sirve como termómetro de confianza en el mercado. Con una salida de $3.500 millones en solo 24 horas, el mensaje es claro: incluso los más firmes hodlers saben cuándo asegurar beneficios. La pregunta que queda en el aire es si el mercado está preparado para absorber este shock de oferta, o si estamos frente a un punto de inflexión en la narrativa alcista de 2025.