Un cambio de paradigma energético: de Bitcoin a la inteligencia artificial
Durante años, Bitcoin ha sido objeto de intensas críticas por su elevado consumo energético, estimado en aproximadamente 176 teravatios-hora (TWh) anuales. Sin embargo, un estudio reciente publicado en la revista Joule por Alex de Vries-Gao, investigador de la Vrije Universiteit Amsterdam, proyecta que la inteligencia artificial (IA) podría superar pronto a Bitcoin en cuanto a demanda energética.
Según el informe, para finales de 2025 la IA podría consumir cerca del 49% de la electricidad utilizada por los centros de datos a nivel mundial, equivalente a unos 201 TWh por año. Este desplazamiento en el foco mediático hacia la huella energética de la IA ofrece a Bitcoin una inusual oportunidad para mejorar su percepción pública.
New analysis by Alex de Vries-Gao predicts that by late 2025, AI’s power consumption will approach half of all global data center energy use — meaning AI could soon outpace Bitcoin mining! #AI #Bitcoin pic.twitter.com/jIfhjLrktm
— YomirGo (@YomirGo) June 3, 2025
A medida que la atención se dirige a la creciente demanda energética de los sistemas de IA, Bitcoin empieza a ser visto como una alternativa más transparente y predecible, lo que podría fortalecer su imagen frente a inversores conscientes del medio ambiente.
Impulso institucional: adquisiciones estratégicas y confianza en el futuro de Bitcoin
El interés institucional en Bitcoin sigue consolidándose. Un ejemplo destacado es la reciente compra de 624 BTC por parte de The Blockchain Group, por un valor de $68.7 millones. Esta adquisición eleva sus tenencias totales a 1,471 BTC, valorados en más de $106 millones.
JUST IN 🇫🇷
PUBLICLY TRADED COMPANY THE BLOCKCHAIN GROUP BUYS 624 #BITCOIN FOR €60.2 MILLION (~$64.6M).
BITCOIN IS UNSTOPPABLE! 🔥 pic.twitter.com/xiOlPTPa5E
— Rishabh Pande (@RishabhPande28) June 3, 2025
Lo más relevante es que la empresa ha anunciado su intención de adquirir hasta 260,000 BTC para el año 2033. Esta estrategia evidencia una fuerte apuesta a largo plazo y un alto nivel de confianza en el crecimiento del activo digital.
Este tipo de movimientos institucionales no solo aportan estabilidad al mercado, sino que también refuerzan la narrativa de Bitcoin como una reserva de valor sólida y resistente, especialmente en contextos de incertidumbre económica global.
Perspectivas futuras: desafíos y oportunidades para Bitcoin
El ascenso de la inteligencia artificial está reconfigurando las prioridades energéticas a nivel mundial, planteando nuevos desafíos regulatorios y medioambientales. En este escenario, Bitcoin podría reposicionarse como un activo más predecible en términos de impacto energético, con un historial de transparencia en sus métricas de consumo.
Aunque la volatilidad inherente al mercado de criptomonedas persiste, los fundamentos a largo plazo se fortalecen con cada nueva inversión institucional y cada ciclo de maduración tecnológica. Bitcoin parece estar preparado no solo para resistir, sino para prosperar en medio del auge tecnológico de la IA.