La ausencia de comentarios sobre tasas e inflación por parte del presidente de la Fed, Jerome Powell, fue interpretada por los mercados como una señal favorable para los activos de riesgo, encabezados por Bitcoin.
Con más de $2.500 millones en flujos de entrada en tres días y expectativas de recortes de tasas en aumento, el mercado proyecta que BTC podría alcanzar los $150.000 antes de fin de año.
¿Puede el silencio de Jerome Powell ser el catalizador del próximo gran salto de Bitcoin?
Durante su discurso del 9 de octubre en la Community Bank Conference, el presidente de la Reserva Federal evitó referirse a la inflación y a las tasas de interés, una omisión que el mercado interpretó como una jugada estratégica. Según Matt Mena, esta “ausencia calculada” equivale a un “luz verde para los activos de riesgo”, en un entorno donde la falta de datos macroeconómicos reduce la presión sobre los mercados.
Con el cierre parcial del gobierno estadounidense deteniendo la publicación de indicadores clave como el empleo y el IPC, tanto los operadores como la Fed carecen de información sólida para justificar nuevas subidas de tasas. En este vacío informativo, el mercado apuesta por un escenario más dovish es decir, de política monetaria más flexible, lo que históricamente ha impulsado a Bitcoin.
Flujos récord y consolidación sobre los $120.000
Entre el 6 y el 8 de octubre, Bitcoin atrajo más de $2.500 millones en flujos de entrada. Solo el lunes 7 se registró una inyección de $1.200 millones, la segunda más grande de la historia, impulsando el precio hasta los $126.000.
El martes, las entradas se moderaron a $440,7 millones, coincidiendo con un fortalecimiento temporal del dólar por el aumento en los rendimientos de los bonos japoneses. Sin embargo, el flujo sostenido demuestra que la liquidez se acumula debajo del mercado, creando un suelo estructural que refuerza la tendencia alcista.
Tasas, liquidez y expectativas de recortes
El CME FedWatch Tool refleja una probabilidad del 95% de que la Fed recorte 25 puntos básicos en su próxima reunión del FOMC, mientras que las probabilidades de un segundo recorte en diciembre alcanzan 81,5%. En Polymarket, la expectativa de una reducción de tasas para diciembre se sitúa en 71%, y los operadores apuestan con 88% de probabilidad a que el cierre del gobierno se extienda al menos hasta el 15 de octubre, retrasando aún más los datos macroeconómicos que podrían alterar el rumbo del mercado.
Para Mena, el contexto es claro: “El mercado está digiriendo ganancias antes de su siguiente impulso, y estructuralmente, es difícil ver un techo mientras la liquidez siga aumentando. Una ruptura por encima de los $130.000 podría actuar como un imán hacia los $150.000.”
Bitcoin entre oro y Nasdaq: dos pilares del ciclo alcista
El análisis también destaca un fenómeno macro más amplio: el oro y el Nasdaq alcanzan nuevos máximos históricos, reforzando los dos pilares que sostienen el actual ciclo de Bitcoin.
Mientras el oro fortalece la narrativa del “debasement trade”, es decir, protección contra la devaluación monetaria, el Nasdaq representa la apuesta por la innovación y el crecimiento tecnológico. Bitcoin, al situarse entre ambos mundos, absorbe capital tanto del refugio tradicional como del riesgo innovador.
Un cierre que suena a advertencia optimista
A pesar del tono sereno del discurso de Powell, el mercado parece haber escuchado un mensaje distinto: la liquidez vuelve a fluir, y la política monetaria se suaviza.
Si la historia reciente sirve de guía, el silencio de la Fed podría ser precisamente el impulso que lleve a Bitcoin a explorar territorios inéditos antes de fin de año.