El reconocido inversor y autor de Padre Rico, Padre Pobre, Robert Kiyosaki, volvió a pronunciarse sobre el futuro del sistema financiero global y reafirmó su apuesta por Bitcoin y otros activos alternativos como el oro, la plata y las criptomonedas. En su más reciente publicación del 9 de noviembre, Kiyosaki afirmó seguir “las leyes del dinero, las leyes de Gresham y Metcalfe”, principios sobre los que basa su estrategia de inversión y sus predicciones para los próximos años.
Una advertencia reiterada sobre el colapso financiero
En su mensaje, Kiyosaki volvió a advertir sobre la posibilidad de un crash masivo en los mercados financieros, algo que ha repetido en múltiples oportunidades y que, según él, se encuentra cada vez más cerca. Frente a este escenario, el autor aconseja refugiarse en lo que denomina “dinero bueno”, una categoría que atribuye a Bitcoin (BTC), Ether (ETH), el oro y la plata.
“Sigo comprando incluso cuando los precios se desploman”, expresó, dejando claro que su estrategia se basa en acumular activos con valor intrínseco o con una red sólida detrás, independientemente de las fluctuaciones del mercado.
Las leyes que guían su filosofía: Gresham y Metcalfe
Kiyosaki explicó que su enfoque de inversión se sustenta en dos principios fundamentales de la economía y la tecnología: la Ley de Gresham y la Ley de Metcalfe.
La Ley de Gresham, formulada por el economista inglés Thomas Gresham en el siglo XVI, establece que “el dinero malo desplaza al dinero bueno”. Esto ocurre cuando el público tiende a gastar el dinero con menor valor intrínseco —como las monedas devaluadas o inflacionarias— y a conservar el dinero más sólido como reserva de valor. Según Kiyosaki, Bitcoin cumple el papel del “dinero bueno”, al ser un activo escaso, descentralizado y no manipulable por los gobiernos.
La Ley de Metcalfe, por su parte, afirma que el valor de una red crece de forma proporcional al cuadrado del número de sus usuarios. En el contexto de las criptomonedas, esta ley explica cómo la red de Bitcoin se vuelve más valiosa a medida que más personas la utilizan, lo que refuerza su utilidad y legitimidad global.
De esta manera, Kiyosaki combina la lógica económica clásica con el análisis de redes modernas para fundamentar su optimismo respecto a la expansión de Bitcoin y otras criptomonedas.
Predicciones para 2026: cifras ambiciosas
Basándose en estas dos leyes, Kiyosaki proyecta que para 2026 Bitcoin alcanzará los 250.000 dólares, el oro llegará a 27.000 dólares por onza, y la plata rondará los 100 dólares. Asimismo, predice un crecimiento exponencial para la red de Ethereum, impulsado por la adopción global y la expansión de su ecosistema de aplicaciones.
Estas cifras, aunque ambiciosas, reflejan su convicción de que los activos digitales y los metales preciosos serán los grandes ganadores en un mundo donde el dinero fíat pierde cada vez más credibilidad.
Un historial de advertencias y controversias
No es la primera vez que Kiyosaki emite alertas de esta naturaleza. A lo largo de los últimos años ha advertido sobre “la caída más grave de la bolsa en la historia”, una predicción que aún no se ha concretado en los términos que anticipaba.
También había señalado que Bitcoin alcanzaría los 200.000 dólares en 2025, una meta que parece difícil de cumplir en el corto plazo. Sin embargo, más allá de la precisión de sus números, su mensaje principal permanece constante: la desconfianza en el sistema financiero tradicional y la necesidad de refugiarse en activos independientes del control estatal.
Crítica a la política monetaria de EE. UU.
En su reciente publicación, Kiyosaki fue especialmente crítico con las instituciones estadounidenses. Aseguró que el Tesoro y la Reserva Federal de Estados Unidos “infringen la ley” al imprimir dinero sin respaldo real.
“Si usted y yo hiciéramos lo que hace la Reserva Federal, estaríamos en la cárcel por falsificación”, escribió, reforzando su argumento de que el sistema actual se sostiene sobre deuda e inflación, lo que erosiona el poder adquisitivo del dinero fiat.
Estas declaraciones no son nuevas en su discurso, pero cobran mayor fuerza en un contexto de creciente deuda pública, tensiones geopolíticas y pérdida de confianza en las monedas soberanas.
La visión de Kiyosaki: protegerse con activos reales
A pesar de las críticas que recibe por sus predicciones extremas, Robert Kiyosaki mantiene una visión coherente y sostenida: acumular activos tangibles o digitalmente escasos como estrategia de protección frente al colapso monetario.
Para él, la verdadera riqueza no está en los billetes, sino en aquello que no puede ser replicado ni inflado a voluntad. Bitcoin, el oro, la plata y Ethereum, en su opinión, cumplen ese rol de refugio de valor en tiempos de incertidumbre.
Las ideas de Robert Kiyosaki sobre Bitcoin combinan filosofía económica clásica con visión tecnológica contemporánea. Sus predicciones pueden parecer exageradas, pero su mensaje central —protegerse del dinero “malo” acumulando activos de valor real— sigue resonando entre millones de inversores que comparten su desconfianza hacia el sistema financiero tradicional.
En palabras del propio Kiyosaki, “sigo comprando, incluso cuando los precios caen”. Y para muchos, esa frase resume toda una doctrina de inversión en un mundo que se redefine a cada ciclo económico.


