El desarrollo del yuan digital, la moneda digital de banco central o CBDC de China, avanza en sus etapas de desarrollo y pruebas, contando con múltiples integraciones en escenarios de la cotidianidad a lo largo de diversos territorios del gigante asiático. En este sentido, desde el Banco Central han destacado la intención del desarrollo de una CBDC que cuente con características centradas en la seguridad, privacidad y el anonimato, descrito además como un «anonimato administrado», según palabras recientes del líder del Banco Central de China, Yi Gang.
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El anonimato y el yuan digital
Durante su intervención en la Fintech Week 2022 de Hong Kong, el gobernador del Banco Central chino mostró sus perspectivas de los diferentes desafíos que representa el desarrollo de una CBDC, valorando ciertas áreas como la protección de la privacidad, la cual considera una clave tras el desarrollo e implementación del yuan digital.
El diseño del yuan digital abordará la protección de la privacidad y la seguridad financiera a través del anonimato general y el «anonimato administrado», explica Yi Gang, quien agrega la intención de garantizar «la seguridad de la información personal a través de tecnología avanzada y una gestión estricta, con pleno cumplimiento de las leyes y reglamentos de protección de la privacidad del consumidor», por medio de: transacciones cifradas, datos anónimos para «las partes que no realizan transacciones» y prohibición del uso o consulta de información privada de manera ilegal.
Gang, enfatizó en su discurso el hecho de que «el anonimato y la divulgación completa no son tan simples como blanco y negro», ya que existen «muchas sutilezas en el medio», lo que significa que la misión es «lograr un delicado equilibrio entre proteger la privacidad y combatir las actividades ilícitas».
Desde 2020, con el contexto pandémico como el último de los componentes que se sumaron para explotar el interés de los bancos centrales del mundo por las CBDC, China tomó el liderazgo en la carrera por las versiones digitales de las monedas nacionales con su yuan digital. Desde entonces, la construcción y las pruebas con la CBDC no han parado entre diferentes territorios del país asiático, que ve en su moneda digital una posibilidad de lograr internacionalizar su moneda y reducir la dependencia global del dólar estadounidense.
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Múltiples escenarios de pago, con un enfoque minorista, han sido protagonistas en las pruebas de la moneda digital china dentro de diferentes territorios estratégicos del país. Bancos comerciales han construido plataformas y billeteras para lograr implementar y adecuarse a la realidad del yuan digital entre sus diferentes productos y servicios. La CBDC china se probó en áreas de utilidad como pagos en comercios, pagos electrónicos, pago de salarios, entre otras. Recientemente, se impulsaron las pruebas a un nuevo nivel con su integración dentro del sistema de transporte público.
El líder del Banco Central chino, también destacó las características de los tipos de billeteras o monederos que se estipularon para el uso del yuan digital, tanto para transacciones en línea como fuera de línea. Asimismo, Gang explicó que para China, el yuan digital surge «principalmente para satisfacer las necesidades de pago minorista nacional, mejorar el nivel de desarrollo de las finanzas inclusivas y mejorar la eficiencia de la moneda y el sistema de pago», haciendo énfasis en los atractivos de una CBDC con respecto a su uso para pagos transfronterizos más eficientes, rápidos y económicos.
Datos del Banco Central de China, aseguran que hasta mediados de octubre, el volumen de transacciones con el yuan digital superaba los 14 mil millones de dólares, entre las 15 provincias chinas en donde se realizan las pruebas con la CBDC, mientras que cerca de 6 millones de comerciantes adoptaron a la moneda digital como método de pago en sus establecimientos.
Uno de los puntos más críticos con respecto al surgimiento de las CBDC, es justamente la forma en que su presencia puede desbloquear nuevos niveles de control hacia los ciudadanos, debido al seguimiento de transacciones y datos financieros para los usuarios, que podrían atentar no sólo contra la privacidad sino derivar en un escenario potencialmente vigilante y represivo para las personas si tomamos en cuenta una expansión de las monedas digitales al uso cotidiano.
Numerosos gobiernos, bancos centrales y organizaciones globales, como el Banco de Pagos Internacionales (BIS), han convertido la discusión, las pruebas y el desarrollo de las CBDC como un punto central en sus agendas. En unas pruebas recientes, el Banco de Pagos Internacionales, como parte del proyecto Aurum, liderado por su Centro de Innovación en Hong Kong, realizó experimentos para respaldar monedas estables o stablecoins con una CBDC.
Imagen cortesía: Eric Prouzet en Unplash
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