Una billetera inactiva desde 2011 movilizó 20,000 BTC con una ganancia potencial de 14 millones por ciento.
El movimiento sugiere gestión estratégica, no venta inmediata.
¿Quién necesita vender cuando puede mover $2.000 millones con solo dos transacciones?
En una de las actividades on-chain más llamativas de 2025, una billetera vinculada a la era Satoshi y que llevaba 14 años dormida transfirió 20,000 BTC (aproximadamente $2.180 millones) el 4 de julio. La operación fue detectada por la cuenta de análisis Lookonchain, que rastreó dos envíos de 10,000 BTC cada uno, realizados con pocos minutos de diferencia.
Ambos monederos habían recibido los fondos el 3 de abril de 2011, cuando el precio de Bitcoin era de apenas $0.78 por unidad. En total, la inversión original habría sido de $15,610, lo que representa una revalorización cercana al 1,400,000%.
Origen común y movimientos técnicos precisos
Datos de blockchain confirman que los dos monederos fueron fondeados desde la misma dirección de origen en 2011, lo que indica que el propietario es muy probablemente una sola persona o entidad.
Lo más intrigante del movimiento es que no se enviaron a exchanges ni se dividieron entre múltiples destinatarios, sino que fueron reenviados a nuevas direcciones: una de tipo P2PKH (legacy) y otra Bech32 SegWit (moderna). Esto podría interpretarse como una reorganización patrimonial o preparación para una futura gestión institucional, posiblemente vía custodia fría o mesa OTC.
¿Venta, consolidación o movimiento estratégico?
A pesar de la magnitud de los fondos movilizados, no se registraron ventas en exchanges tras las transacciones, lo que reduce la posibilidad de un impacto bajista inmediato. El comportamiento sugiere más una reorganización estratégica de activos a largo plazo que una liquidación súbita.
Sin embargo, la posibilidad de una futura venta extrabursátil (OTC) no está descartada. Estas operaciones suelen mantenerse fuera del radar del mercado abierto precisamente para no afectar el precio.
Por ahora, los 20,000 BTC están distribuidos en dos nuevas direcciones. Las próximas acciones on-chain del titular permitirán entender mejor su intención final.
En un ecosistema donde cada satoshi cuenta, la reaparición de una ballena de la era fundacional de Bitcoin genera tanto respeto como misterio. Lo que haga a continuación podría escribir un nuevo capítulo en la historia financiera de la red.