El mundo de las criptomonedas ha sido testigo de un nuevo episodio de hackeos y robos. Chris Larsen, cofundador y presidente ejecutivo de Ripple, se ha visto comprometido tras un acceso no autorizado a sus cuentas personales de XRP. Según informes, aproximadamente 213 millones de XRP, valorados en unos 112 millones de dólares, fueron sustraídos de sus activos personales. Ante este escenario, la plataforma Binance, bajo la dirección de su nuevo CEO Richard Teng, ha tomado medidas decisivas.
Richard Teng, recientemente nombrado director ejecutivo de Binance, informó que su equipo logró congelar una parte significativa de los fondos robados, equivalentes a 4.2 millones de dólares. «Al enterarnos temprano del ataque sufrido por Ripple, nos complace anunciar que el equipo de Binance logró congelar una cantidad de XRP robada por el atacante, valorada en 4.2 millones de dólares», detalló Teng. Este acto no solo demuestra la eficiencia y rapidez de Binance sino también su compromiso de colaborar con Ripple en las investigaciones en curso.
El CEO de Binance también enfatizó su intención de continuar apoyando a Ripple en sus esfuerzos por recuperar los fondos, incluyendo el monitoreo de los fondos aún en poder del atacante. La comunidad y analistas de blockchain, como Zachxbt, jugaron un papel crucial al alertar a las bolsas de criptomonedas sobre el movimiento sospechoso de los tokens.
Por su parte, Thomas Silkjær, líder de análisis y cumplimiento en la Fundación del Ledger de XRP, reconoció rápidamente la acción de Teng y expresó su gratitud por las medidas responsables y oportunas tomadas. Silkjær aclaró que las cuentas comprometidas pertenecen a Larsen personalmente y no representan una vulnerabilidad en Ripple. Asimismo, destacó la importancia de la prudencia en la divulgación de información durante un ataque, resaltando los riesgos de influir en la metodología de los atacantes.
La situación ha sido descrita por Larsen como un «incidente aislado», agradeciendo a Silkjær y a la Fundación del Ledger de XRP por su apoyo. Este incidente resalta la necesidad de una vigilancia constante y medidas de seguridad robustas en el mundo de las criptomonedas.
El caso continúa en investigación, con Ripple a la cabeza tras recibir una transferencia completa de datos de la Fundación del Ledger de XRP. La comunidad criptográfica sigue expectante ante el desarrollo de los acontecimientos y las medidas que se tomarán para prevenir incidentes similares en el futuro.
