En una operación conjunta de la Unidad de Crimen Organizado del Reino Unido (SEROCU), la Policía Estatal de Hessen en Alemania, la Agencia Nacional de Crimen del Reino Unido (NCA) y la EUROPOL, dieron con el arresto de una persona de 36 años acusada de fraude, robo y lavado de dinero, que afectó a usuarios de la criptomoneda IOTA.
Según el informe de EUROPOL el sospechoso robo más de 11 millones de dólares de IOTA a más de 85 victimas desde Enero del año pasado.
La investigación inicio a principios del año 2018 luego de que la policía de Hessen en Alemania recibiera diversos informes de personas a las cuales le fueron robadas de sus wallet la criptomoneda IOTA. Al parecer el fraude involucró al sitio web Iotaseed.io y que ya no se encuentra disponible. El sitio web estaba dirigió a usuarios de IOTA quienes generaban en línea la semilla con 81 dígitos, las cuales fueron almacenadas por el proveedor del servicio y que luego fueron empleadas por el sospechoso para extraer el dinero y desviarlo a otras billeteras creadas con identificaciones falsas.
En el mismo 2018 las autoridades alemanas identificaron que el sospechoso detrás de estos robos se encontraba en el Reino Unido y el caso fue entregado entregado al Grupo de Trabajo Conjunto de Acción contra la Delincuencia Cibernética (J-CAT) organizado en el Centro Europeo de Ciberdelincuencia (EC3) de Europol, donde el apoyo analítico entregado permitió a la J-CAT coordinar la cooperación internacional entre los diferentes Estados miembros de la UE involucrados.
En septiembre, Europol advirtió contra las crecientes amenazas de los piratas criptográficos, la extorsión y el malware de minería, y dijo que las tenencias de quienes utilizan monedas digitales, así como los intercambios, están cada vez más en riesgo a medida que crece el «abuso criminal» de la tecnología financiera.
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