Las empresas de criptográfia aún tienen problemas para abrir cuentas bancarias, según informe de Bloomberg

En un reciente informe publicado, Bloomberg explica cómo las empresas criptográficas aún tienen problemas para realizar aperturas de cuentas en instituciones bancarias en el mundo, que aún ven con recelo la industria criptográfica y su regulación actual

De acuerdo a la publicación de Bloomberg, los bancos aún no han mostrado su lado más amigable con la industria criptográfica, sosteniendo una prohibición general debido al temor a las actividades ilegítimas, pero aunque estas actividades han estado en constante reducción, y las legítimas se han multiplicado, los bancos prefieren mantener una prohibición general, según afirmó Jerry Brito, Director Ejecutivo del grupo de defensa de criptografía, Coin Center.

Sam Bankman-Fried, Director Ejecutivo de la firma de comercio de activos digitales, Alameda Research, aseguró que «la respuesta estándar de ‘simplemente ir a su sucursal local de Chase’ no funciona en cripto», haciendo referencia a la firma bancaria Chase Bank, una subsidiaria de JP Morgan, y añadió que pese a tratarse de una actividad que no es ilegal, al referirse a que los bancos realicen operaciones con la industria criptográfica, estos simplemente no lo hacen y aseguró que «es un gran dolor de cabeza que no quieren poner los recursos para resolver».

Recientemente, JP Morgan lanzó su criptomoneda JPM Coin, que se dedicará, en principio, para realizar pagos entre cuentas institucionales, en lo que representa una movida significativa de la empresa para adentrarse en la industria criptográfica, aunque aún analiza desde cerca cada paso.

En otra cita publicada en el informe de Bloomberg, Robby Houben, un abogado y profesor de la Universidad de Amberes, explicó que ha «conocido a gente realmente de pie en criptografía que no merecen una reputación tan mala y quieren que el sector esté regulado. Sin embargo, para cada uno de ellos, hay muchos otros que intentan estafar al público, lavar dinero o eludir impuestos», por lo que sentenció «ningún banco está dispuesto a ayudarlos».

De igual forma, el Director Comercial de BitPay, Sonny Singh, explicó que los bancos tienen políticas muy rígidas de conocimiento de su cliente (KYC) y contra el lavado de dinero (AML) que «no se ajustan para trabajar con empresas de cifrado». Por otro lado, en el caso de Mark Lamb, Director Ejecutivo de CoinFLEX, con sede en Hong Kong, aseguró que paga a los empleados, abogados y contadores en criptografía o en stablecoins, como Tether. Además, añadió:

«El sistema bancario nunca ha sido amigable con el cifrado, y aunque tal vez eso tuvo algún sentido en los primeros días, continuar etiquetando a todos los negocios de cifrado como de alto riesgo es indefendible y proteccionista (…) Me estoy lavando las manos y ahora evito los bancos por completo»

Una de las razones para esta problemática con las firmas bancarias, describe Bloomberg, es la infraestructura detrás de las reglas contra el lavado de dinero de los bancos, necesita que éstos verifiquen la identidad de sus clientes, así como la fuente del dinero de los mismos, por lo que «construir un sistema de cumplimiento y monitoreo es costoso, y algunos bancos concluyen que los costos simplemente no valen la pena», explica la publicación.

En Londres, la empresas criptográficas también tienen problemas con los bancos, como es el caso de la firma de inversión y asesoría en blockchain, NKB Group, quien ha sostenido por meses discusiones con posibles aliados bancarios, pero sin éxito alguno, como explicó Ben Sebley, director de corretaje de la empresa.

«Negar la banca básica es una locura, impide el crecimiento del sector y obliga a las empresas a ser creativas para resolver el problema (…) los bancos están siendo demasiado prudentes»

Finalmente, el artículo también mencionó que representantes de las instituciones bancarias JP Morgan y Bank of America, se negaron a comentar con respecto a sus tratos con empresas criptográficas, mientras que un portavoz de HSBC, aseguró que el banco está monitoreando el desarrollo de las monedas digitales y las regulaciones a su alrededor, y que no realiza transacciones bancarias virtuales.