Si bien es de total conocimiento, China está posicionada como el país con mayor cantidad de mineros de criptomonedas pero su gobierno no acepta a Bitcoin y ha restringido totalmente las operaciones de extracción en el país. Recientemente se conoció que los mineros de China han decido cambiar de ubicación y otros migrar de territorio. Pues bien, Georgia, un país ubicado en el límite de Europa y Asia, se está convirtiendo en el epicentro de extracción de monedas virtuales por su bajo costo en el sector eléctrico.
Normalmente, Islandia y China Continental son los destinos que los mineros tienen como primera opción debido al tema de energía pero pocos han descubierto a Georgia, una región de Eurasia clasificada como la segunda área más rentable del mundo para la minería de criptomonedas, quedando justo por debajo de China. Georgia lleva años siendo famosa por su vino, sin embargo, actualmente se está volviendo una zona llamativa para quienes buscan obtener ganancias vinculadas a las criptomonedas.
Mineros de bitcoins y demás monedas han estado acudiendo masivamente a este destino, no solo por el beneficio de la economía energética sino además por la escasez de regulaciones del país relacionadas con el ecosistema criptográfico. Caso contrario al de China. A pesar que muchos georgianos desean que la economía digital prospere en el país, el Banco Central de Georgia ha emitido declaraciones a potenciales inversionistas minoristas de que las criptomonedas pueden ser “inversiones arriesgadas”. Al tiempo que, un partido político ha estado minando criptomonedas para financiar sus campañas.
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Por su parte, Bezhani Buzhaidze, un residente de Telavi que subsidia sus ingresos extrayendo bitcoin y zcash contó que en el año 2017 recaudó USD $800 cada treinta días minando zcash y por costos de electricidad solo pagaba USD $80 al mes. Además, los georgianos consideran que las criptomonedas han migrado el sueño de la tecnología, al punto de que en algún momento los free markets puedan ser liberados en todo el mundo sin la presencia del capitalismo clientelista. A juicio de Buzhaidze, llegará un momento en el que no se necesitara de la banca tradicional y considera que eso “será bueno para la sociedad”.
Según una investigación de Galt & Taggart, el uso del sector energético de Georgia puede ser sumamente lucrativo, ya que los precios por potencia de vatios en la región son aproximadamente de cuatro a seis U.S. centavos de dólar / kWh. Cuentan con 22 plantas hidroeléctricas en construcción en Georgia y 72 hidroeléctricas establecidas en el país.
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