Para hacerle frente a las sanciones, la empresa Rusal, alquilará una parte de su planta de aluminios a la startup, Russian Mining Corporation (RMC), quien buscará tomar hasta un 20% de la minería global de Bitcoin, al instalar operaciones en la infraestructura de la plata ubicada en Karelia
La planta rusa de aluminio, Rusal, voltea su mirada hacia la mineria de Bitcoins, luego de ser sancionado por los Estados Unidos en 2018, por lo que ahora está alquilando su planta a la startup rusa llamada, Russian Mining Corporation (RMC), según lo informa el portal RBC. «Ahora la planta de Rusal no es rentable, la electricidad que se le suministra prácticamente no se utiliza y las personas que viven en la ciudad de una sola industria cerca de la planta no tienen donde trabajar», aseguró el fundador RMC, Dmitry Marinichev.
Luego de las sanciones por parte de la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos (OFAC), quien calificó al accionista mayoritario de Rusal, Oleg Deripaska, como un «oligarca ruso designado», sancionando así a la empresa desde el año 2018. La reactivación de una de las instalaciones de la planta, pasarían a RMC, quienes usarían esa energía barata para instalar mineros y seguir con la expansión rusa dentro del mercado minero de bitcoins a nivel mundial. Según informa RBC, el país posee alrededor del 10% de capacidad minera mundial de bitcoins.
Se planea que la compañía capture el 20% del mercado actual de minería de bitcoin, además, la instalación se realizará en cooperación con el proveedor de intercambio y billetera, Cryptonex, según lo declarado por Marinichev. «Nuestra idea es rediseñar la planta y vender su potencia informática como servicio, es decir, proporcionar un servicio de Tecnología de Información (TI)», agregó.
Como parte del acuerdo, Cryptonex transfiere 42 millones de sus tokens nativos CNX a la empresa minera, con un valor aproximado de 85 millones de dólares, según lo informo Cryptonex.
Imagen cortesía: Shutterstock
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